Su gente recorre y se muestra por todos y cada uno de los rincones de la provincia de Buenos Aires, pero pareciera que no alcanza, que no es suficiente. Cada vez son menos. Semana a semana, día a día, el diputado nacional Francisco de Nar-váez, ex candidato a Gobernador, titular de Unión Celeste y Blanco y ganador de las legislativas de 2009, observa con bronca y tristeza cómo sus otrora aliados se pasan a las filas del tigrense Sergio Massa.

Las fugas más visibles, y que más ruido causaron, se dieron en la Legislatura bonaerense, donde el “Colorado” quedó ahora con un bloque de apenas cuatro integrantes (Gonzalo Atanasof, Mauricio D´Alessandro, Fernando Rozas y Guillermo Brito). Sin embargo, también hubo “pases” en decenas de concejos deliberantes, tanto del Conurbano como del interior: Olavarría, Ensenada, Bahía Blanca, Avellaneda, Las Flores y Esteban Eche-verría son sólo algunos ejemplos.

Sin duda, Massa se convirtió, políticamente hablando, en el peor enemigo de De Narváez, y pasó a ocupar el puesto que éste tuvo en aquellas elecciones en las que el campo fue protagonista. Todos se quieren ir con él, y es el mimado de la mayoría de las encuestas. Pero existen diferencias. Los massistas dicen que el alcalde de Tigre tiene algo para mostrar, en referencia a la gestión llevada adelante en el distrito. Y los denarvaístas se agarran de la “transparencia” del legislador, ya que “siempre la jugó de opositor”.

Con ese eslogan, el ex integrante de la Udeso intenta poner coto a la fuga y, por qué no, recuperar algunos de los alfiles perdidos. “El tema con Sergio Massa, a quien yo respeto como gestionador de uno de los municipios más destacados del Conurbano, es, si finalmente es candidato y elegido como diputado, si va a estar a favor de la reforma constitucional o no”, indicó De Narváez. El “Colorado” agregó: “Si es diputado, él y los que vayan en la lista, ¿van a estar a favor de la reforma constitucional, de Cristina eterna, o no?”.

El hombre de Las Cañitas intenta ubicar a Massa del lado del oficialismo, y así hacer que los que se fueron buscando en el tigrense una alternativa al kirchnerismo decidan pegar la vuelta. Aun-que, se sabe, eso es casi imposible. Massa, más allá de decir que es parte del peronismo y que el fututo también será peronista, juega a hacer silencio. Como le dijo a La Tecla en el mes de enero, “no tiene sentido salir a contestar”. Y menos cuando las encuestas lo muestran bien arriba.

Falta mucho y, a la vez, falta poco. Lo cierto es que De Narváez no encuentra dónde ubicarse, y se está quedando cada vez más solo, situación que lo complica sobremanera de cara a las venideras legislativas. Así lo entiende el diputado nacional, ex denarvaísta y ahora massista, Alberto Roberti, quien señaló que “De Narváez sacó una solicitada (Ella o Vos) porque no tiene dirigentes con quién relacionarse en el peronismo bonaerense. De Narváez está en una soledad absoluta”.

Frases como ésta se escuchan a lo largo y ancho del territorio provincial. Tal vez algunas sean sentidas y con conocimiento de causa, pero otras muchas tienen que ver con las circunstancias. Los muchachos referenciados con Unión Celeste y Blanco de los pagos chicos tienen en claro que llegó el momento de “salvarse”, de renovar una banca o hacer sus primeras experiencias a nivel legislativo. Y así como en 2009 la oportunidad fue con De Narváez, hoy parece que es con Massa.

Las Flores: Denarvaistas, duhaldistas y con ganas de ser massistas

Tras ganar las elecciones de 2009 de manos de Francisco de Narváez, el concejal Ramón Canosa y sus tres
aliados (había uno más, se fue con Macri) terminó jugando en el espacio de Eduardo Duhalde. Sin embargo, debido a inconvenientes surgidos en la junta partidaria, no le posibilitaron ser candidato a intendente. Ahora, de cara a 2013, en más de una oportunidad, el escribano Canosa manifestó que ve con buenos ojos la figura de Sergio Massa, siempre y cuando rompa con el kirchnerismo.

Fuente: La Tecla