Los juegos de cartas son muy populares en toda América del sur debido a nuestras raíces coloniales. Pero especialmente en Argentina hay una debilidad por jugar a las cartas, ya sea baja española, los populares naipes franceses, o cualquier otra de las barajas más populares.

Ahora repasamos los juegos de cartas favoritos de los argentinos. ¡Haz tu cuenta para saber cuántos te faltan por jugar!

• Póker

No es para nada autóctono, pero sin duda es uno de los más populares del país. En los casinos, en las calles y en los teléfonos móviles en forma de casinos online es común ver a las personas jugándolo durante horas.

Argentina tiene su propia versión de póker, la cual es nacida en los suburbios de Buenos Aires, llamada Póker Stingray (o mantarraya).

Aquí el flop no es de 3 cartas, sino de 6, las cuales se colocan en forma de círculo. El resto del juego es idéntico al Texas hold ‘em, dos cartas privadas, cuatro rondas de apuestas (contando la ciega), un turn y un river. La diferencia es que si el jugador tomará cartas del big flop para su jugada, solo puede tomar tres cartas que estén puestas en posición consecutiva en el círculo.

• Blackjack

Después del póker, el siguiente juego de azar por el que deliran los argentinos es el blackjack. Jugar al blackjack es entregarse enteramente al azar, dos cartas para tratar de sumar 21 puntos, y la posibilidad de pedir más si las cuentas están lejos.

A pesar de que sí es posible aplicar estrategia, es un juego de azar en el cual los más pacientes encuentran una genial manera de ganar dinero frente a los que quieren desesperadamente sumar 21 en cada jugada.

• Truco

Pero en Argentina no se juega cualquier truco, sino que se juega al Truco Argentino, una especie de póker combinado con el truco o joc del truc tradicional español.

Se sacan los comodines y todos los ochos y nueves de la baraja y se reparten tres cartas a cada jugador para contar en el truco y en el envido. Al final, gana el que sepa jugar mejor sus cartas más altas.

• Tute cabrero

El tute y su variante, el tute cabrero, son otros dos de los juegos de cartas con amplio espacio en el mercado. El objetivo es simple: no quedar segundo; pues aquí no pierde el último sino es que estuvo más cerca de quien resultó ganador.

Un palo de la baraja se declara como “triunfo” y se reparten tres cartas a cada jugador. El primero, el que sale, lanza una carta y los siguientes deberán jugar una mayor o una del palo de triunfo, sino tiene, entonces deberá jugar cualquier otra.

Luego que todos jueguen, se llevará la mano y sumará los puntos quien haya jugado la carta más alta del palo del jugador que salió. Al final no importa quién gana, sino el que pierde sumando canas.

Es uno de esos juegos difíciles de explicar y que es mejor ver para aprender a jugar, lo definitivo es que es divertido.

• Poto sucio

Poto sucio, también conocido como C#!0 (tú sabes lo que dice allí) sucio. A pesar del nombre, es un juego muy divertido. Un jugador toma una carta y la esconde bajo sus glúteos, dándole nombre al juego. Algunos juegan simplemente apartando la carta.

Luego se reparten las cartas entre jugadores y se sacan los pares. Luego, de a uno, los jugadores toman una carta de su compañero a la derecha y, si logran armar un par con ella, lo sacan del juego.

Al final, inevitablemente un jugador quedará con el poto sucio, esa carta cuyo par está en glúteo de alguien en la mesa.

Como estos juegos, hay muchos otros juegos de cartas populares en la Argentina. Además, esas habilidades probabilistas que se desarrollan en este tipo de juegos de azar han servido para que un Argentino salga campeón de Magic, el juego de cartas. Las estrategias del azar las llevamos en las venas.