El gobierno de Javier Milei no le da respiro a los jubilados

El aumento del 2,69% en las jubilaciones y pensiones para diciembre es un golpe más a la ya castigada clase pasiva. La jubilación mínima pasará a ser de $259.598,76, y con el bono de $70.000, el monto total será de $329.598,76. Sin embargo, según datos de la Defensoría de la Tercera Edad, la canasta básica para un jubilado alcanzó a $912.584 mensuales. Esto significa que el haber mínimo es tres veces menor a lo que debería estar ganando un jubilado.

La situación es aún más grave cuando se considera que el gobierno de Milei ha tomado decisiones que han perjudicado a los jubilados, como la eliminación de la cobertura del 100% en el PAMI. Además,los aumentos de esta semana en Carne, Pollo y Cerdo; la fuga de capitales hacia las grandes empresas y la falta de atención a los reclamos de los jubilados en el PAMI son un claro ejemplo de la desigualdad y la injusticia que enfrentan los adultos mayores en Argentina.

Es hora de que se tomen medidas para abordar esta situación, es hora de que quienes acompañaron a este gobierno, el radicalismo por ejemplo; salgan del silencio y de esto también hablen para poder garantizar que los jubilados puedan vivir con dignidad. El esfuerzo no puede ser solo para que se beneficien los grandes de la economía, es hora de que se piense en los que más lo necesitan.

La frase «hay que hacer el esfuerzo» es una tremenda y nefasta frase que ha pegado fuertemente en la sociedad argentina, pero es momento de que se cambie este discurso y se piense en la justicia y la igualdad para todos. Porque los que hicieron campaña para este Gobierno nacional saldrán dentro de poco a querer mostrar que son otra cosa, pero han acompañado cada decisión del ejecutivo nacional, incluso las que van en contra de la clase pasiva. Esa misma clase social que sigue esperando gobierno tras gobierno el reconocimiento económico que tanto merecen, lamentablemente siempre son la variable de ajuste más débil.